jueves, 28 de junio de 2007

Valores de los personajes principales del Mío Cid

HAZAÑAS DEL MÍO CID

“Los valores que se encarnan en la historia y sus personajes.”

Vicente Huidobro

Los valores normalmente son considerados como virtudes principalmente transmitidas por la educación que los padres nos otorgan. Hay diferentes tipos de valores, uno de ellos es en cuanto a polaridad en la cual hay valores positivos y negativos. Nos basaremos en los valores positivos, entre los cuales se pueden destacar la lealtad, la justicia, el honor, la esperanza y fidelidad, entre otros, los cuales se pueden ver en la historia de Rodrigo Díaz de Vivar, también conocido como el Cid campeador.

Rodrigo Díaz de Vivar es un héroe español que gracias a los valores que le han otorgado sus padres, se convierte en un héroe cristiano, un guerrero fuerte, valiente, leal tanto a España como al rey y como al honor de su familia, tan grande es su honor que ha llegado a elegir salvar el honor de su padre matando al padrino, casi padre, de Jimena, la mujer que ama, arriesgándose a terminar su relación con ella, lo cual se puede demostrar en la siguiente cita: “Jimena le mira con ojos desesperados. Ya sabe lo que ha pasado; el conde le contó todo ayer por la noche, y conociendo a Rodrigo adivina que una tragedia se prepara.

Al verlo saltar sobre el caballo, llena de angustia le grita:

-Rodrigo, ¿qué vas a hacer? Piensa en mí.

-Pienso en mi padre - responde Rodrigo.

-Piensa en mi amor.

-Piensa en mi honor.” (Huidobro, Vicente. Mío Cid Campeador, Hazañas. p. 79 - 80)

Ahí se ve claramente como el Cid prefiere salvar el honor de su padre ante lo que piensa Jimena, se ve que es seguro de sí mismo, lo cual es muy importante, ya que no necesita depender de otras personas y no le importa la opinión de los demás, quienes le tenían mucha envidia, llegando a crear grandes defectos de él. Uno de los ejemplos es García Ordóñez, quien estando celoso del Cid, le comienza a decir al rey Alfonso VI falsas cosas del Cid, como por ejemplo que el Cid quiere quitarle el trono. Esto se puede apreciar en la siguiente cita: “(…) Pero la Envidia se acerca y le dice al otro oído:

- Rey Alfonso, rey Alfonso, el Cid se cree más que tú. Entre él y tú, tu pueblo está por él. No lo dejes alzarse mucho, no sea que un día te aplaste. Es un hombre orgulloso, y donde está presente no hay nadie más que él. (…) Rey Alfonso, rey Alfonso, García Ordóñez será tu hombre; aleja de ti a Rodrigo (…)” (Huidobro, Vicente. Mío Cid Campeador, Hazañas. Pp. 258)

Aquí se muestra claramente como García Ordóñez, representado por la Envidia, le muestra al rey una falsa imagen de Rodrigo. Este es el hecho que hace que el rey destierre al Cid.

El Cid, aunque haya sido desterrado por el rey, sigue mostrando lealtad a la corona española, ya que al vencer a los moros, cumple su promesa con el rey llevándole el botín de guerra capturado en batalla, de este modo, logra hacer que el rey le tenga respeto y cariño de nuevo, y de esta forma, ser aceptado nuevamente en España.

Los amigos que acompañan al Cid también muestran algunos valores, Martín Antolínez, Per Bermúdez y Álvar Fáñez, se muestran siempre leales tanto a Rodrigo Díaz de Vivar, como al rey y a España, acompañan al Cid a las batallas y a donde vaya. Son valientes y fieles compañeros.

Otra de las personas que siempre estuvo ahí para Rodrigo Díaz de Vivar fue Jimena. Ella y el Cid desde el principio de la novela tuvieron un romance, se puede decir que fue amor a primera vista. Todo iba bien, ambos se amaban y ambos lo sabían, pero este romance se vio interrumpido, como había explicado antes, cuando el Cid mata al padrino de Jimena para salvar el honor de su padre.

Después de este hecho, ambos se separan, Jimena queda sola, y aún después de lo que ocurrió, jamás olvida al Cid, y está dispuesta a esperar por su regreso sin traicionarlo. Siempre espera noticias de él para saber si está bien. Nunca pierde la esperanza de que alguien llegue con la noticia de que Ruy Díaz de Vivar viene de vuelta sano y salvo.

Por lo tanto, se puede ver que Jimena es fiel, espera al Cid sin importar lo que pase. Y aún sabiendo que estaba en la guerra y que podía morir, nunca lo traicionó, siempre mantuvo la esperanza de que él regrese a su lado.

En esta novela, se puede apreciar que los valores positivos de los personajes son muy semejantes. Se puede distinguir que los valores apreciados en la época son ser valiente, leal tanto al rey español, como a España, y como al honor de la familia, ya que si alguien ha perdido el honor, uno debe vengarse sin importar de quién se trate. Se ve que deben ser valientes y fuertes.

También se puede apreciar que las mujeres de la época eran leales a sus esposos, quienes iban a la guerra y ellas los esperaban con la esperanza de recibir la noticia de que regresan a su lado sanos y salvo.

Todos estos valores se han ido perdiendo a lo largo de la historia, ya que se ha ido perdiendo el patriotismo, el tema del honor de la familia no tiene el mismo peso que en aquella época.

Los valores de las mujeres también se han ido perdiendo, ya que no todas las mujeres son leales tanto a sus esposos como novios. Lo mismo ocurre con los hombres, si bien no todos van a la guerra, solo basta con que desaparezcan un tiempo para perder a la pareja.

Yo opino que la mayoría de los valores que los personajes que el libro muestra son buenos, y al comparar ambas épocas me he dado cuenta los valores que han ido desapareciendo, lo cual encuentro que está mal, ya que nos vamos destruyendo como persona. Encuentro que ir perdiendo el valor de lealtad tanto como pareja como con las amistades nos destruyen por dentro, ya que la lealtad es un valor precioso que deberíamos pensar en volver a retomar.



Bibliografía:

Libro Mío Cid campeador, Hazañas.

Diccionario Real Academia Española.



M. José Dibán

II ° C


1 comentario:

Unknown dijo...

No puedes hablar de España ya que España en la época del Cid no existía. En todo caso habla de Castilla, León, etc...